IRUYA, Salta, Argentina, 09/02/20.- En el verano, cuando ya ha llovido lo suficiente, el terreno se cubre con su traje verde, color que produce una sensación de paz, símbolo de la fértil vida vegetal en nuestro planeta. Y sin vegetales no sería posible la vida.
Surge entonces una importante reflexión: es un deber de todos como sociedad el cuidar el entorno, el ambiente, la Pachamama. Sin verde no hay posibilidad de vida. Es deseable que cada quien comprenda la importancia de este concepto fundamental. (Ph: Verónica Casini).
