IRUYA, Salta.- Una caminata corta, bordeando el cementerio. Se ve el Hotel Iruya; a los costados, plantas de pita y molles. (Foto: Belén Wedeltoft).

IRUYA, Salta.- Una caminata corta, bordeando el cementerio. Se ve el Hotel Iruya; a los costados, plantas de pita y molles. (Foto: Belén Wedeltoft).